En esta entrega platicaremos del origen del día del estudiante, aunque se celebra en muchos países, solo en México es el 23 de mayo.
Te contamos sus antecedentes.
Bajo el mandato del presidente Porfirio Díaz, se inauguró la Universidad Nacional Autónoma de México, en 1910.
La Ley Constitutiva presentada por Justo Sierra, señalaba al Ministro de Instrucción Pública como jefe de la Universidad y el rector era nombrado por el presidente de la República.
Hasta 1929 los alumnos de la Facultad de Derecho y de diferentes facultades y escuelas, que en ese entonces conformaban la Universidad, organizaron un movimiento estudiantil que buscaba la autonomía universitaria, así como la demanda de algunas reformas.
Ya que las autoridades universitarias anunciaron los cambios que harían: añadir un año de estudios a la educación preparatoria y cambiar los exámenes profesionales en la Facultad de Derecho.
Estas reformas no eran las esperadas por los estudiantes y los llevó a negociar con las autoridades de nuevo, pero sin éxito.
Lo que resultó que el 5 de mayo llamaron a huelga y colocaron la bandera rojinegra en la puerta del Colegio de San Ildefonso (Antiguo campus de la Facultad de Derecho).
Dos días después, por órdenes del presidente Emilio Portes Gil, el rector clausuró la facultad y fue que el 9 de mayo, la huelga fue declarada oficialmente.
Luego de varios días de negociaciones fallidas, el 23 de mayo el conflicto universitario derivó en violentos enfrentamientos.
Los estudiantes, armados con garrotes, se enfrentaron a la policía, la cual intentó dispersar a los estudiantes valiéndose de potentes chorros de agua y demás artefactos, los bomberos a fuerza de hachazos buscaban derribar las puertas de las instituciones donde se refugiaron los estudiantes, hubo una gran cantidad de heridos y más planteles se unieron a las protestas.
El enfrentamiento terminó cuando el jefe del Departamento del Distrito Federal ordenó la retirada de policías y bomberos, se ofreció como intermediario en las negociaciones ante el presidente.
La represión hizo que las demás facultades y la opinión pública apoyarán el movimiento estudiantil. Seis días después de la revuelta, el presidente Portes Gil concedería oficialmente la autonomía de la máxima casa de estudios.
Y fueron los propios alumnos quienes solicitaron que se reconociera el 23 de mayo como el Día del Estudiante, por supuesto, en honor a los heridos durante la lucha por la autonomía de la Universidad.
En JDB conmemoramos ese día y todos los demás, fortaleciendo sus habilidades con acompañamiento académico, creemos firmemente en el potencial de los estudiantes, cada uno es valioso y por ello nuestro lema es “Preparando las mentes del futuro”.
Si requieres asesoría en alguna materia no dudes en contactarnos.
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